Envasado al vacío: La mejor forma de mantener un jamón

25 Feb Envasado al vacío: La mejor forma de mantener un jamón

Envasado al vacío: La mejor forma de mantener un jamón

Comer jamón resulta una delicia, pero puede ser difícil disponer de un jamón entero. Incluso si lo compras, quizás sea complicado cortarlo y guardarlo para conservarlo apto para consumo. Por eso, el corte de jamón y envasado al vacío es la solución para que satisfagas tus antojos pequeños de jamón.

¿Por qué debes envasar un jamón al vacío?

El corte de jamón y envasado al vacío consiste en deshuesar y colocar en lonchas o en trozos el jamón. Este se empaqueta en envases de plástico a los cuales se les extrae el aire de la parte interna.

Como la carne no recibe oxígeno, el procedimiento de oxidación se ralentiza. Eso a su vez evita que los microorganismos proliferen. Descubre las ventajas de optar por este tipo de corte y envasado al vacío del jamón.

No necesita unas condiciones de refrigeración exigentes

El jamón que se envasa al vacío no exige condiciones específicas de refrigeración. La sugerencia es que el lugar donde se almacene no reciba luz solar y tenga una temperatura inferior a 21 grados.

De hecho, la recomendación es no congelarlo para que no se acumule agua en su parte interna. Bastará con que lo coloques en un lugar seco y fresco o que lo refrigeres dentro de tu nevera en verano.

Luego, es más fácil de servir

Una vez que quieras disfrutar del corte de jamón y envasado al vacío, no tendrás inconvenientes para servirlo. Solo sácalo de la nevera, abre la bolsa y deja que se temple y se airee durante algunos minutos. Te aconsejamos que lo sirvas paso a paso, mientras te dedicas a servir picos o cortar pan.

De esa forma, podrás comprobar que los trozos se separan naturalmente. Esto es indicativo de que es momento de servirlo. Si no lo pides cortado en lonchas, igual te será fácil cortarlas tú. Sea lo que sea que decidas, sin duda podrás saborear el jamón, disfrutarlo y apreciar sus matices.

Apenas ocupa espacio en la nevera

El almacenamiento del corte de jamón y envasado al vacío es extremadamente sencillo, si se compara con un jamón entero. Después de deshuesarse y envasarse, el jamón ocupa muy poco espacio en la despensa o la nevera.

Por esa razón, no tendrás ningún problema en guardar los demás alimentos que necesiten refrigeración. Si eliges colocar el jamón cortado y envasado en un armario, simplemente corrobora que no haya humedad.

Puede ser un regalo perfecto

El corte de jamón y envasado al vacío puede ser un excelente regalo con diferentes presentaciones. Por ejemplo, puedes elegirlo en trozos o lonchas en bolsas decoradas para ser incluidas en una gran cesta gourmet. Si juntas el jamón con más embutidos, tendrás un regalo que a cualquiera le gustaría recibir.

Se trata de un alimento delicioso y duradero que resulta muy fácil de disfrutar, en cuanto se desee probarlo. Además, el jamón está en la lista de alimentos saludables de una dieta mediterránea.

¿Hay algún inconveniente en el envasado al vacío?

Los inconvenientes con el corte de jamón y envasado al vacío generalmente surgen por no saber cómo conservarlo y consumirlo. Por ejemplo, si intentas despegarlo inmediatamente después de sacarlo de tu nevera, prácticamente no podrás hacerlo.

Eso se debe a que su grasa se solidifica y actúa como una especie de pegamento. Además, después de abrir el sobre, la regla es consumir todo el jamón para que no le salga moho.

En caso de que no sea posible, cambia los sobrantes a papel parafinado o aluminio. Aunque lo mejor es que encargues sobres de jamón pequeños que puedas consumir de una vez con tu familia.